Compartimos contigo el conocimiento del mexicano Aurelio Coronado, perito en psicología forense, que participó en el XVII Congreso de Psicología Jurídica y Forense del Caribe 2021. ¡No te lo pierdas!
Desde el año 2005, el IEMP ha participado en los Congresos de Psicología Jurídica y Forense del Caribe. El pasado 23 y 24 de septiembre apoyamos la transmisión del encuentro virtual del año 2021 a través de nuestro canal de YouTube.
La última versión del Congreso fue organizada por la Procuraduría General de la Nación (PGN), a través de la Delegada para el Ministerio Público en Asuntos Penales, la Fiscalía General de la Nación y las Universidades Konrad Lorenz y del Norte.
Los temas analizados fueron el feminicidio, la violencia contra la infancia, la tecnología y la ciencia en la investigación criminal, y la justicia transicional en Colombia.
El encuentro virtual tuvo un total de 419 participantes, de los cuales 12 fueron ponentes. Por otro lado, es importante destacar que la sede del Congreso fue en Barranquilla, y que 52 personas de los asistentes son del departamento del Atlántico.
Además, resaltamos la participación de seis departamentos de la costa colombiana, así como el registro de residentes en 25 departamentos, incluida Bogotá D. C., y seis asistentes de otros países. Las visualizaciones de la primera jornada, a la fecha, se acercan a las 2150.
Durante el evento tomamos apuntes de las intervenciones de los expertos(as). En diferentes entregas, compartiremos contigo las principales ideas de los ejes desarrollados en las dos jornadas.
«La globalización genera nuevas formas de delincuencia»: María Eugenia Cárdenas, procuradora delegada
La moderadora del XVII Congreso de Psicología Jurídica y Forense del Caribe 2021 fue Lida Milena Rodríguez Navarro, entrevistadora forense del Centro de Atención Integral a Víctimas de Abuso Sexual (Caivas) de la Fiscalía, quien, además, hizo parte fundamental de la organización del evento.
En la apertura del encuentro virtual estuvo nuestra directora, Camila Afanador Vargas, quien destacó la relevancia de estos espacios académicos que permiten «identificar las problemáticas de la justicia» en materia penal.
Camila Afanador señaló que el propósito del Congreso fue analizar e intercambiar conocimientos, tanto de expertos internacionales como nacionales, sobre los temas desarrollados en las conferencias.
La intención de este escenario virtual, en palabras de nuestra directora, fue «identificar las mejores formas de abordar estas problemáticas que enfrenta la justicia, gracias al generoso aporte de conocimientos y experiencias de diferentes expertos de distintas disciplinas, cuyas visiones enriquecieron el Congreso».
Por su parte, la procuradora delegada para el Ministerio Público en asuntos penales, María Eugenia Cárdenas, precisó que «la ciencia forense con sus métodos científicos de pensamiento crítico y lógico, siguiendo una serie de fundamentos, principios y procesos, genera resultados que determinan medios de prueba que contribuyen al esclarecimiento de los hechos que interesan a la Administración de Justicia».
Para la procuradora delegada, «la globalización, así como los avances de la comunicación, también ha generado nuevas formas de delincuencia, más elaboradas y complejas», y de ahí la importancia de estos espacios académicos que llenan los vacíos de conocimiento en materia de investigaciones.
María Eugenia Cárdenas subrayó, al final de su intervención, que «el Congreso ofrecería aportes importantes para mejorar las intervenciones de los funcionarios en el escenario del proceso penal».
Feminicidio, características, abordajes psicosocial y jurídico
La primera mesa de este eje temático estuvo compuesta por Aurelio Coronado de Aguascalientes (México), quien es doctor en psicología y maestro en ciencias forenses.
Coronado es autor de múltiples publicaciones sobre falsas alegaciones, investigación criminal y feminicidios, y relacionadas con autopsias psicológicas, prevención social de la violencia y protocolos de investigación forense con respecto a la tortura. Todas estas temáticas las desarrolla con enfoque en derechos humanos (DD. HH.) y perspectiva basada en género.
El conferencista habló sobre la autopsia psicosocial y su relación con la investigación de feminicidios, y cómo esta herramienta se puede insertar en la indagación de casos. Además, explicó aspectos relevantes del Modelo de protocolo latinoamericano de investigación de muertes violentas de mujeres por razones de género (femicidio/feminicidio).
Los autores y editores del modelo son la Oficina Regional para América Central del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y la Oficina Regional de ONU Mujeres para las Américas y el Caribe.
El modelo contiene los pilares de la investigación forense. Según Coronado, el problema de los casos de feminicidio tiene como centro la falta de investigación y la debida diligencia. Para el experto, los protocolos son herramientas que pretenden elevar los estándares de las pruebas.
Para el perito en psicología forense, lo más importante que se olvida recolectar en una investigación es el contexto, donde la psicología forense es importante porque aporta al juicio, al caso, y porque permite entender mejor la evidencia conductual, es decir, las acciones que se puedan comprobar en una escena.
El contexto nos muestra «los precedentes de las personas involucradas, del agresor, de la víctima, el lugar en donde viven, y obviamente estoy hablando de una perspectiva psicosocial», mencionó Coronado.
Los estudios psicosociales le dan el mismo peso a las características individuales que al entorno. Precisamente, la autopsia psicológica, cuando hablamos de la víctima, intenta utilizar y seguir el modelo de protocolo de feminicidio de Naciones Unidas.
Violencia por razones de género
Coronado manifestó que la violencia por «razones de género» está relacionada con conductas orientadas por prácticas y discursos culturales como, por ejemplo, los roles de género, es decir, lo que deben o no hacer hombres y mujeres.
En conclusión, la cultura hegemónica es la que establece los tipos de comportamientos según el género, y cuando hay una supuesta desviación de dichos roles, algunos individuos aplican la pretendida «corrección» que finalmente deriva en hechos violentos, precisó Coronado.
Señaló, además, que para el caso del feminicidio existen algunas frases de quienes ejercen violencia que tratan de justificar un crimen: «a mí no me dejas», «por qué te vistes así», «qué estás viendo en el celular», o simplemente quieren deshacerse de la pareja porque encontraron otra.
El modelo de protocolo de investigación de muertes violentas de mujeres por razones de género, aunque determina los pasos fundamentales para llevar a buen término un proceso, presenta algunos problemas para su efectiva aplicación en Latinoamérica, consideró Coronado.
Naciones Unidas, según el experto, reconoce que la crisis forense en estas latitudes se debe:
- a la falta de personal,
- a la falta de material,
- a la falta de capacidad técnica de forenses.
Todo esto conlleva a un sinnúmero de cuerpos sin identificar y obviamente a personas dadas por desaparecidas, afirmó el experto. Y añadió que «la crisis forense tiene que ver con que se ha ido construyendo una psicología que, en realidad, tiene más que ver con las necesidades burocráticas de las instituciones y las narrativas políticas, que con la práctica de una disciplina científica».
Psicología forense con perspectiva de DD. HH.
La propuesta del conferencista en materia de DD. HH. aplicada a la psicología forense se basa, esencialmente, en el análisis de la evidencia no solo física sino también psicosocial.
La autopsia psicosocial para Coronado tiene características distintas a lo que sería la autopsia psicológica que se practica de forma tradicional. Y la psicología forense con perspectiva de DD. HH. tiene unas dimensiones de análisis tanto técnicas como metodológicas y críticas, que permiten:
- determinar las herramientas que vamos a aplicar,
- conceptualizar sobre el crimen, qué tenemos enfrente,
- indagar sobre la literatura y las variables que podemos utilizar para hacer la evaluación,
- buscar datos relevantes para el análisis: testimonios, hechos colaterales, rasgos de conducta de los agresores previos o anteriores al hecho, etc.,
- hacer interpretaciones psicosociales utilizando metodologías científicas o abordajes metodológicos que se centran en los vínculos del individuo con su contexto: afectivos, sociales, de identidad, con la comunidad.
Aurelio Coronado comentó al auditorio virtual que el enfoque diferencial también es importante en los análisis forenses, porque «no es lo mismo ser mujer que ser mujer afrodescendiente, o con discapacidad, o ser niña con discapacidad».
Estas, según el invitado, son «dimensiones móviles que hacen visibles elementos que no veríamos con el prejuicio, que nos permiten expandir la investigación que es lo importante».
Para el expositor, el dato, el hecho, la interpretación y la opinión facilitan la reflexión, especialmente la última que finalmente presenta el contexto de la investigación en general, «y obviamente la experiencia como forense», recalcó.
Coronado complementó su intervención señalando que una vez clara la perspectiva de género en una investigación, especialmente en casos de feminicidios, los forenses deben tener presente la técnica al final, que es la aplicación de:
- un test,
- una entrevista,
- un análisis de contexto,
- una reconstrucción del crimen,
- un análisis de la escena.
El investigador internacional precisó que esas son las evaluaciones, los peritajes tradicionales, pero su propuesta es ir más allá mediante la aplicación de la autopsia psicosocial.
Si te perdiste la primera jornada del XVII Congreso de Psicología Jurídica y Forense del Caribe 2021, puedes revivirla aquí, con un solo clic.
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